Vaya esta higa brasileña de buen rollo y protección para todo el mundo. Yo nací con ella puesta en los puños, y me consta que no soy el único animalillo al que le ha pasado, porque lo he visto en un montón de bebés cuando están dormidos. A mí se me coloca sola cuando estoy en una situación incómoda, así, como si fuera un piloto automático. Hace poco leí que, en los países nórdicos, es una incitación más o menos grosera al sexo, y que básicamente representa a lo femenino: todo esto hace que me guste aún más, así que me parece un gesto ideal para recibir a este nuevo año. ¡Feliz 2014!
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